IPA participó de la marcha junto a la CGT y presentó un documento con 5 puntos básicos de un plan industrial para defender a las Pymes y a los trabajadores

2024-05-02
El presidente de Industriales Pymes Argentinos (IPA), Daniel Rosato, encabezó una columna de más de 150 empresarios Pymes que marcharon al Congreso de la Nación, en el marco del Día Internacional del Trabajo, detrás de una bandera de IPA con el pedido de la implementación de un plan industrial, que permita fortalecer el mercado interno y les devuelva el poder adquisitivo a los trabajadores. También se quejaron por el efecto negativo para la producción nacional y el empleo que generan la apertura de las importaciones, la falta de financiamiento, y la suba de los costos energéticos y de los insumos difundidos.
“Las Pymes participamos del acto que organizó la CGT, porque coincidimos en la necesidad de un plan industrial que cuide a las empresas y a todos los puestos de trabajo, en un país que necesita con urgencia más cantidad de fábricas y más empleos, con salarios bien pagos, para poder combatir el flagelo de la pobreza y la desigualdad. Por eso los empresarios que hoy participamos del acto nos comprometimos para defender a la producción”, sostuvo Rosato, en el marco de la multitudinaria movilización.
IPA presentó un documento, que fue leído por la organización del acto, con cinco puntos clave para la implementación de un plan industrial: “Las Pymes argentinas también marchamos por el trabajo. Porque somos el eslabón más cercano entre los trabajadores y los empresarios, porque convivimos a diario, codo a codo, y porque somos el sector que más empleo genera en todo el país. Sin Pymes no hay trabajo; y sin trabajadores, no hay Pymes”.
El primero fue el mercado interno, en donde se señaló que “a solidez de la producción y el comercio nacional es la base que todo país industrializado tiene para desarrollarse” y sostuvo que “el poder adquisitivo de los trabajadores conforma el círculo virtuoso de la actividad económica de un país”. “Entonces, el problema no está en un consumo que genera inflación, sino que los aumentos de precios se dan cuando la especulación financiera está por encima del desarrollo productivo. Reclamamos un mercado interno fuerte”, señaló el documento.
En torno al mercado externo, las Pymes aclararon que “la producción nacional es competitiva”, pero señalaron que “pierde esa ventaja de los portones hacia afuera de las fábricas, lo que comprueba que los salarios no son el problema, sino que son parte de la solución”. “Abrir las fronteras para que haya inundación de productos terminados o insumos que se fabrican en el país sólo tiene un efecto real: importamos trabajo de países que sí apuestan por su industria, lo que implica que eliminaremos el salario local, el empleo y también las Pymes. Pedimos regulación del comercio exterior, con una administración inteligente del Estado”, destacó.
En el capítulo de financiamiento, IPA afirmó que “un modelo que piense en el desarrollo de la actividad productiva y que fortalezca a los trabajadores necesita de un sistema financiero orientado a la industria”, y aseguró que “nunca debería ser más rentable un plazo fijo, un bono o el ahorro en dólares, que las ganancias que deberían dar las fábricas que producen, abastecen el mercado


interno y exportan sus excedentes”. “Necesitamos crédito y promociones industriales, como sucede en todo el sistema capitalista”, remarcaron los industriales.
En tanto, IPA pidió la pesificación de los costos energéticos: “La Argentina es un país rico en recursos naturales. Petróleo, gas y minería son un bien de los argentinos, porque nacen de nuestro suelo. El costo dolarizado a precio internacional de las naftas y del gas, por ejemplo, se constituye en un despropósito productivo, porque pone a las Pymes y a los trabajadores en pie de igualdad con países que tienen tasas mínimas de pobreza, promociones industriales y empleados con salarios que consolidan una clase media fuerte. Si el gas y el petróleo salen de nuestro suelo y les pertenece a los argentinos, no puede medirse en dólares. No son subsidios, son precios de origen. Exigimos la pesificación para no asfixiar a la industria y a los trabajadores”.
Por último, la entidad que representa a las Pymes de todo el país se quejó por los precios de los insumos difundidos: “Como sucede con la energía, hay costos de insumos que utiliza la industria que se producen en la Argentina, pero que están valuados en dólares y, además, por ser empresas oligopólicas (pocas empresas que dominan el mercado) los precios están por encima de lo que cuestan en el mundo”.
Y alertó: “Ese mercado está regulado y no se permiten importaciones o, en su defecto, esas grandes empresas nacionales y multinacionales castigan a sus clientes que deciden buscar alternativas. Esto les quita competitividad a las empresas y no permite expandir el mercado laboral. Intimamos a que haya un verdadero mercado libre para que las Pymes no sean rehenes de sus proveedores”.